La base de este proyecto es recrear lo más posible un Hábitat- Biotopo de Arrecife, basándome en el estilo IWAGUMI y en este caso en un numero impar de rocas; tres.
Parto de una roca artificial fragmentada y poco realista.
Pero antes de seguir con esta temática, como en todo inicio hay una buena limpieza.
El Acuario con unas medidas de 3400 mm largo x 1500 mm fondo x 800 mm alto mm hacen un volumen de
4080 litros.
Teniendo el continente lo más limpio posible, me dispuse a la construcción de la roca principal del Iwagumi, cuyo termino correcto es OYAISHI, la cuál técnicamente debe tener 2/3 de la altura del acuario y su forma lo más natural posible me permitiría el éxito del paisajismo.
Para ello emplearía fragmentos de la roca artificial de origen, fibra de vidrio, resina epóxi, roca natural y arena coralina de diferente granulometría.
Una vez que la roca (OYAISHI) estaba cogiendo forma, y estaba prácticamente acabada, me dispuse a darle la altura correcta, permitiéndome igualar toda la base de forma inicial.
Entonces fue cuando realmente cogió forma.
Lógicamente, deje aperturas, que permitieran en cierta medida la no acumulación de detritos, tolerando el movimiento del agua por su interior, y por supuesto siendo durante el día una protección excepcional a los temerosos peces y durante la noche, la cama a compartir por la mayoría de ellos.
En este caso el empleo de arena coralina tiene dos virtudes, la primera dar la textura natural ideal y la segunda donde interviene la paciencia, ya que será la luz la responsable lentamente de la aparición de la coralina.
Así que en un principio, chocaba a la vista ambos contrastes, así que tocaba esperar el ciclado de la roca.
Una vez fijada la roca OYAISHI me dispuse a la preparación de la segunda roca más importante en el paisaje , la llamada FUKUISHI. Iría a la derecha de OYAISHI, es muy importante que tenga la dirección, el movimiento similar y la textura de la principal.
La desarrollo a través de cuatro piezas de roca de Indonesia unidas por poliuretano expandido.
Esta se encargará de darle profundidad a todo el complejo, ya que el ojo pierde eficacia visual en un metro y medio de fondo. Diríamos que su posición aumenta visualmente la profundidad de la urna.
Finalmente la tercera roca SUTEISHI, debe ser una roca lo más sencilla posible, pero con expresión. Debe casi pasar desapercibida, pero al mismo tiempo dará equilibrio al paisaje final.
Esto ya estaba cogiendo forma, después de determinar el lugar de FUKUISHI y SUTEISHI , extendiendo la arena con uniformidad, que es otra de las diferencia del sistema Iwagumi, respecto a otro tipo de paisajes donde el sustrato va en gradiente de mayor a menor hacia el frontal.
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